Aparte de los factores de éxito más o menos objetivos y abstractos, hay un factor determinante por sí mismo, para que existan buenas prácticas, que son las personas que participan en ellas. Nos referimos a estas personas por las funciones que desempeñan, “sus oficios”. A lo largo de la exploración hecha por el proyecto DiálogosRB.net han destacado los siguientes oficios, por su gran incidencia en que las iniciativas emprendidas conduzcan a una mayor sostenibilidad.
Gestores. Dentro de esta categoría están los gestores o equipos de gestión de las RBs y cualquier otra modalidad de cargo que asuma la dinamización de iniciativas práctica, como desarrollo de una línea de sostenibilidad. Es habitual que actúen como fermento del conjunto social en la evolución de un área hacia el desarrollo sostenible.
Decisores locales. En esta categoría hay que considerar a los miembros de los gobiernos locales, corporaciones municipales, responsables de entidades de gestión de recursos comunales, responsables institucionales de varios niveles que tienen incidencia directa sobre un territorio determinado. Ellos cumplen la función de conectar las acciones llevadas a cabo con los actores locales, o por iniciativa de éstos, con las instituciones locales y supralocales, así como la función de trasladar las políticas más generales al ámbito local, con la finalidad de mejorar la sostenibilidad del territorio y de la población.
Líderes sociales locales. Incluimos en esta categoría aquellos actores que tienen capacidad de liderazgo, sea económico, ambiental o social, y capacidad de generar discurso social y promover la implicación de otros actores locales. Su papel es muy importante como inductores de redes de ámbito local y de iniciativas surgidas desde la base. Con frecuencia se conviertes en motores destacados del cambio.
Productores de cualquier sector económico. En interacción con diversos tipos de líderes o dinamizadores es muy importante su implicación y compromiso con prácticas sostenibles. Cuando eso ocurre supone que los principios teóricos han pasado a las prácticas comunes del conjunto social y, por tanto, que la finalidad ha sido alcanzada.
Formadores. Las actividades de formación para introducir innovaciones en las prácticas del conjunto social han demostrado un gran potencial de concienciación y eficacia en la comunicación. Todos los tipos de formadores que intervienen en un proceso de transición a la sostenibilidad territorial cumplen ese importante papel de trasmisores del enfoque sostenible en cualquier área de actividad. La puesta en escena de todos estos oficios, en la búsqueda de una mayor sostenibilidad territorial, exige de las personas algunas condiciones relacionadas expresamente con actitudes y valores, como transparencia, sinceridad en las interacciones, espíritu de colaboración, respeto para considerar las diferentes opciones y un firme compromiso con los recursos comunes y el bienestar del conjunto social.